Entradas

Mostrando las entradas de septiembre, 2024

La Spazio tra di noi - El espacio entre nosotros

  La Spazio tra di noi Quello spazio tra noi, che mi circonda di nuvole grigie che presagiscono una tempesta di solitudine e malinconia, quell'eco fredda di un addio vuoto, senza quel caldo abbraccio che, tra le tue braccia, tutte le mie emozioni salgono nel più bello dei cieli, calmi Nel profondo della mia anima, quello spazio che travolge il mio cuore, rimpianto silenzioso che i miei occhi non sanno nascondere. Posso tacere un'infinità di ti amo... ma non posso fare nulla se fermi per un attimo lo sguardo nei miei occhi, troverai un'eternità di sentimenti fluttuanti come foglie al vento, sussurri di parole innamorate dal fuoco nel tuo sguardo, dalla tenerezza della tua anima, dalla morbidezza e dalla dolce fragranza della tua pelle innevata, tutto ciò che puoi vedere è coperto da una pioggia sottile che bagna questo cuore spezzato, attraverso questo spazio tra i due. È un abisso che sembra insondabile, uno spazio crudele e ghiacciato che deprime queste speranze di s

El espacio entre nosotros

  Ese espacio entre nosotros, que me envuelve entre nubes grises que auguran tormenta de soledad y melancolía, ese frío eco de una despedida vacía, sin ese cálido abrazo que, entre tus brazos, se elevan todas mis emociones al más bello de los cielos, cala hondo en lo profundo de mi alma, ese espacio que sobrecoge mi corazón, silencioso lamento que mis ojos no saben ocultar. Puedo callar una infinidad de, te quieros… más nada puedo hacer si detienes tu mirada un minuto en mis ojos, encontrarás una eternidad de sentimientos flotando como hojas al viento, susurros de palabras enamoradas del fuego en tu mirada, de la ternura de tu alma, de la suavidad y dulce fragancia de tu nívea piel, todo eso que podrás ver está cubierto de una sutil lluvia que empapa este roto corazón, por este espacio que hay entre los dos. Es un abismo que parece insondable, cruel y helado espacio que abate estas esperanzas de sentirte, si pudieras estar un minuto en mí y pudieras saber como te contemplan mis ojo

¿Dónde habitas?

  ¿Dónde habitas, dónde te pudiera visitar? ¿podrás escucharme, acaso puedes verme? Puedo saber quién fuiste, puedo verte estoico con porte galante, dentro de ese marco en ese tono mate, en lo que fue para ti un día tan importante, más no pude alcanzarte para escucharte, no pude verte, pronto tuviste que marcharte, antes de llegar aquí, fui destinado a tu ausencia y aun así en el fondo eres parte de mi esencia, eres una marca de melancolía y tristeza. En lugar de tus brazos llenos de amor, tuve al abrazo de un profundo dolor que no podía comprender, que parecía no fenecer, algo buscaba desde el amanecer hasta el atardecer, siempre ese anhelo, ese profundo deseo de tener tan gratos recuerdos, de fraternales caricias, de tiernos besos rebosantes de ternura. Desgarrador sentimiento de extrañarte sin haber estado a tu lado, que infortunio tan oscuro que mi único encuentro contigo fuese una sienciosa despedida, lúgubre momento, negro mar de emociones, cruel y fría lluvia de lágrimas t

Plegaria en penumbras

Debo dejar mi ofrenda de inefables sentimientos, en silencio, en el altar de esta nívea diosa, tan sublime como hermosa, mis plegarias deben elevarse solemnes cual incienso hasta la gloria de tú cielo, mis ojos fijos en el ocaso, anhelando aquel cálido abraso.  Cerrados mis labios permanecer deben, aunque anhelen expresar tan elocuentes y piadosas oraciones en este templo rebosante de adoración a tú melancólico corazón. Estas sensaciones que erizan mi piel y mantienen convulso este corazón, latiendo tan fuerte al verte deben silenciarse en los rincones de esta solitaria noche, entre los silencios de las penumbras desvaneciéndose como arena entre los dedos, así de efímeros como el paso del tiempo ante la inconmensurable vastedad del universo. No es el tiempo ni el lugar para poder volar en libertad, no hay paraíso, no hay jardín donde merodear entre aromas fragantes de místicas y delicadas flores, debo dejar aquí colgado estos sentimientos en sus albores,  debo crucificar este amor,