El espacio entre nosotros
Ese espacio entre nosotros, que
me envuelve entre nubes grises que auguran tormenta de soledad y melancolía, ese
frío eco de una despedida vacía, sin ese cálido abrazo que, entre tus brazos, se
elevan todas mis emociones al más bello de los cielos, cala hondo en lo
profundo de mi alma, ese espacio que sobrecoge mi corazón, silencioso lamento
que mis ojos no saben ocultar.
Puedo callar una infinidad de, te
quieros… más nada puedo hacer si detienes tu mirada un minuto en mis ojos, encontrarás
una eternidad de sentimientos flotando como hojas al viento, susurros de palabras
enamoradas del fuego en tu mirada, de la ternura de tu alma, de la suavidad y
dulce fragancia de tu nívea piel, todo eso que podrás ver está cubierto de una sutil
lluvia que empapa este roto corazón, por este espacio que hay entre los dos.
Es un abismo que parece
insondable, cruel y helado espacio que abate estas esperanzas de sentirte, si pudieras
estar un minuto en mí y pudieras saber como te contemplan mis ojos, si pudiera
yo estar en tu lugar un minuto y poder sentir todo eso que calla tu boca y que
gritan tus ojos, quizá no existiría más, este espacio entre nosotros.
Duele y desgarra lento hasta el
alma, esta distancia aún estando tan cerca, si supieras como me haces temblar,
si pudiera saber yo lo que ocultas tan bien, en la oscura y solitaria noche
entre mis sueños, se escapan lágrimas de una profunda melancolía, pues ahí en
ese mundo silencioso no existen abismos, las distancias se acortan, las
barreras se derrumban, se disipan las penumbras.
No existe más ese espacio entre
nosotros.
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